Publicado el

Experiencia familiar y extrañada (Revista Acción)

Al inicio se oye algo así como una sucesión de sonidos sueltos, pero de a poco empieza a distinguirse, inconfundible, la melodía: “La cumparsita”, con todo su sabor porteño, aparece para volver a diluirse y reaparecer. Escuchar este segundo volumen de los “postangos” de Gandini es a la vez una experiencia familiar y extrañada, propia de uno de los más notables compositores e intérpretes de música “culta” o “de vanguardia” de nuestro país, que también tocó con Piazzolla y efectuó arreglos para Fito Páez.

Sobrio e intenso, en estos diez temas, solo con su piano, el autor de la ópera La ciudad ausente cita la tradición popular amorosamente y con un conocimiento evidente, a través de una interpretación reflexiva, que da mucha importancia a los silencios y en la que cada nota parece cuidadosamente pensada. Sugiriendo apenas el tema (“Malena” o “La última curda”, por ejemplo) en algunos tramos y en otros abordándolo directamente, hay algo de milagroso en el modo en que Gandini hace un arte rigurosamente erudito que, cuando se asoma a lo popular, lo asimila sin convertirlo en pretexto para “otra cosa”, con un enorme respeto. (Epsa Music) D. F.

Revista Acción, Nº 939.